¡Hola Chocolateros y Chocolateras! Estamos ya en pleno verano y muchos ya no encendemos el horno ni por todo el oro del mundo ¡Qué hace mucho calor!
Para sofocar estos calores que están haciendo hoy os proponemos la receta de un helado, ¡Los míticos MAGNUM CASEROS! En esta ocasión los hemos hecho de chocolate blanco, mi favorito desde la infancia, pero tened en cuenta que los podéis hacer con cualquier otro chocolate, simplemente sustituye el chocolate blanco por la misma cantidad de tu chocolate favorito e incluso puedes añadir almendras troceadas al chocolate.
Empezamos que es muy fácil y ¡sin heladera!
Para hacer esta receta hemos usado el Chocolate Blanco de Milka como podéis ver en las fotos, es muy suave y fácil de fundir, perfecto para bañar estos helados y además nos gusta mucho su sabor.
Además para hacer los helados en forma de Magnum necesitaréis un molde para helados, nosotras hemos usado este molde que compramos muy económico y además lleva la tapa de silicona con lo cual no tenemos que estar gastando plástico para taparlos. También necesitarás los palos para helados.
Receta
Ingredientes para 6 unidades aprox.:200 ml de nata 35% M.G
100 ml de leche condensada
3/4 cdta de vainilla en pasta
400 gr de chocolate blanco Milka.
90 ml de aceite vegetal (Coco o girasol)
Elaboración:
Preparamos los moldes con los palos para helados.
Ponemos la nata bien fría en el bol de la batidora, los cuales hemos metido un rato antes en el congelador para que también estén bien fríos. Batimos hasta que empiece a montar.
Bajamos la velocidad de la batidora al mínimo y añadimos la leche condensada poco a poco y la vainilla.
Volvemos a subir la velocidad de la batidora para semimontar la nata, es decir, no tiene que llegar a montar del todo, debe quedar fluida, como masa para bizcocho para que así podamos rellenar bien los moldes.
Vertemos la nata en un jarra y rellenamos los moldes para helados. Acomodamos bien la nata dando unos golpecitos contra la encimera para que no queden burbujas de aire en los helados.
Retiramos el exceso de nata con una espátula y tapamos a piel con papel film, o en este caso, como el molde lleva tapa de silicona se la ponemos.
Llevamos a la nevera al menos 8 horas o hasta el día siguiente.
Troceamos el chocolate en un vaso alto en el que quepan los helados enteros y vertemos el aceite por encima, fundimos al baño maría o en el microondas. Reserva a temperatura ambiente.
Desmolda los helados y rápidamente baña en el chocolate, aguanta unos segundos para que resbale el exceso de chocolate. Verás que enseguida se solidifica el chocolate, deja sobre papel film y baña el resto de helados.
Vuelve a guardar en el congelador una media hora para que el chocolate se vuelva duro.
¡A disfrutar!
Si os gusta hacer vuestros propios helados caseros en casa no os podéis perder estos Polos Veganos de Oreo o este Helado de Chocolate con Leche, cacahuetes y miel.
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